“El mejor portero que ha habido en la provincia”,
afirmaba con contundencia un Diario de Cádiz del año 1944. Hablaba de Plácido,
portero nacido en la futbolera zona de Madariaga. Pero ¿quién era Plácido?
A finales de la década de los años veinte y hasta
finales de los años treinta, hablar de
portero en San Fernando era hablar de Plácido. Todos los compañeros y
aficionados lo llamaban “el Chalao”. Ya por entonces ponerse bajo los tres
palos era sinónimo de locura.
Plácido García Martínez era un portero poco al uso. Dicen que
tenía un estilo tremendamente peculiar y que
no respondía a la imagen tipo del portero de fútbol.
Un manchón cualquiera, o una calle, dos piedras, un
balón aún sin válvula, pero con vejiga y mucha ilusión por el noble deporte del
balompié. Así comenzaron los desafíos de “el Chalao”. Ya a un nivel más oficial en el campo de La
Pista en San Carlos y desde julio de 1926 en el Campo de Deportes de la S. E.
C. N. en Madariaga.
Su rostro se
mostraba desfigurado, motivado por
picaduras propias de alguna enfermedad tipo lepra o viruela, que dejaban
huella. Una gorra a cuadros y unas espectaculares rodilleras eran parte de su
atuendo particular. Una de sus jugadas favoritas era la zamorana, imitando al
mítico Ricardo Zamora.
Todos los
equipos de La Isla y la zona se lo rifaban. Si algún club quería hacer un gran
proyecto de equipo, en la portería el “Chalao” de Plácido. El San Fernando Fútbol Club con los Mangano,
Tellado, Llamas, Bernardo, Fajardo, Chano o Arrones. O más tarde la SD
Constructora Naval 1926 que completó un excelente equipo que solía ganar todos
los partidos que disputaba. Entre ellos nuestro Plácido, Montero y delantero
Fajardo. No llegó a hacer carrera
futbolística a nivel nacional, pero era lo suficientemente conocido por la
numerosa afición de San Fernando, Cádiz, Puerto Real, etc.
P.D. La foto principal es un recorte de este cartel
completo.
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